miércoles, 23 de junio de 2010

Detrás del tiempo me instalé, ya ves, ni me quejo ni me quejaré. Mi ser, mis recuerdos y alguna canción son hoy mi premio de consolación.
¿Y tú? ¿Qúé has hecho para olvidar? ¿Qué fue de aquella chica del bar?
Lo sé, prohibido preguntar.
Muy bien, seré sincera.

Cubrí mis ojos con mis manos y luego imaginé que estabas ahí disimulando por mí.
Cierra la puerta, ven y siéntate cerca que tus ojos me cuentan que te han visto llorar. Llena dos copas de recuerdos, de historias, que tus manos aún tiemblan si me escuchan hablar...

Sin ti ya no podré escuchar a La Buena Vida más, ni volver a reirme de aquel final en el que el bueno acaba mal... Sin ti ya no regresaré al lugar donde te conocí.
Lo sé, prohibido recordar.
Muy bien, seré sincera.

Cubrí mis ojos con mis manos y luego imaginé que estabas ahí disimulando por mí.
Cierra la puerta, ven y siéntate cerca que tus ojos me cuentan que te han visto llorar. Llena dos copas de recuerdos, de historias, que tus manos aún tiemblan si me escuchan hablar...

Tú cuídate, aquí yo estaré bien...
Olvídame, yo te recordaré...

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